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Blog - Editorial
22 Octubre 2021 / Por Consejo Editorial

Carta del Consejo Editorial

A la opinión pública:

Hemos recibido distintos mensajes de personas que expresan malestar por la publicación del texto “Hablemos de mujeres” publicado en el dossier “Mujeres y feminismos” de nuestra revista. Al respecto, deseamos comunicar lo siguiente.

 El dossier, como su nombre lo indica, está organizado de tal manera que el tema central se aborda desde varios ángulos: la clase y la riqueza (Krozer), las violencias (Piccato), el poder político (Castañeda, González, Melgoza) y la cuestión del sexo (Corres). En este sentido, incluir un texto emanado de una postura “feminista radical” no tiene nada de extraño: expresa una de las formas de concebir la cuestión. También comprendemos que existen corrientes que consideran que esta postura discrimina, invisibiliza y estigmatiza a personas trans y no binarias. Como todos los discursos políticos, el feminismo no es uno sino muchos y se construye de las disputas entre los distintos grupos.

Río Arriba no pretende privilegiar a una posición sobre otra. No se asocia editorialmente con ninguna, sino que desea ser una plataforma para su discusión razonada. Reconocemos que lo ideal debió ser incluir, desde el primer momento, otros textos que disputaran el ya citado y dieran voz a las críticas respectivas. Por este motivo, el Consejo Editorial ya solicitó réplicas que pronto serán publicadas y ocuparán el mismo espacio en el dossier.

Esta decisión editorial también refleja el posicionamiento de Río Arriba en una discusión más amplia sobre lo que puede o no escribirse y debatirse: el de la libertad de expresión y de prensa.  En el modelo estadounidense, por ejemplo, la libertad de expresión está prácticamente por encima de cualquier cosa, siempre que no se pase de la palabra a la acción. Se entiende como parte del espacio público de contrapeso al poder; sus límites están dados por la posición de poder de quien la ejerce y, sobre todo, por sus efectos y consecuencias. En los modelos europeos, en cambio, predomina la idea de que hay expresiones que pueden ser dañinas para las personas. En México no existe una discusión abierta sobre el tema aplicada al ámbito editorial, sin embargo, está establecido el criterio de prohibición de la censura previa. 

Río Arriba nace precisamente como un espacio plural para debatir preocupaciones en marcha desde una perspectiva de izquierda. En ese sentido, todo lo que publicamos tiene oportunidad de debatirse y rebatirse. Parte del objetivo de la revista es abrir un espacio amplio para discutir temas a los que la inmediatez, brevedad y dinámica de las redes sociales nunca les harán justicia.

Cuando las cosas cambian en el mundo, y sobre todo cuando cambian rápidamente, no hay mejor forma para ir construyendo los asideros que nos hagan una sociedad más incluyente, libre e igualitaria que el debate mismo.

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